J. D. VANCE PATEÓ EL TABLERO

Durante 20 minutos, en uno de los escenarios más visibles de la diplomacia mundial y en un momento especialmente crítico, el vicepresidente de Estados Unidos optó por centrarse en lo que considera una deriva de las élites europeas: desde el caso de un ciudadano británico condenado por rezar en silencio junto a un centro de salud que practica abortos hasta el de las elecciones en Rumanía. El núcleo de su intervención se centró en la defensa de los «valores comunes» que, según el vicepresidente de Estados Unidos, los propios europeos estarían pisoteando.

Vance dijo: “Aunque la administración Trump está muy preocupada por la seguridad europea y cree que podemos llegar a un acuerdo razonable entre Rusia y Ucrania, también creemos que es importante que Europa tome medidas importantes en los próximos años para garantizar su propia defensa.

Porque la amenaza que más me preocupa en Europa no es Rusia, no es China, no es ningún otro actor externo.

Lo que me preocupa es la amenaza desde dentro: el retroceso de Europa en algunos de sus valores más fundamentales. Valores compartidos con los Estados Unidos.

Pienso en Suecia, donde el gobierno condenó hace dos semanas a un activista cristiano por participar en incendios de Coranes, en queb los los musulmanes asesinaron a su amigo. Como señaló de manera aterradora el juez en su caso, las leyes suecas, que se supone que protegen la libertad de expresión, no conceden, y cito, «un salvoconducto» para hacer o decir cualquier cosa sin correr el riesgo de ofender al grupo que posee ese credo. O en este mismo país, donde la policía ha realizado redadas contra ciudadanos sospechosos de haber publicado comentarios antifeministas en línea, siempre en el marco de la lucha contra la misoginia en Internet.

Quizás aún más preocupante, me dirijo a nuestros queridos amigos del Reino Unido, donde el retroceso de los derechos de conciencia ha puesto en peligro las libertades fundamentales de los británicos, en particular de los creyentes”.

Sus críticos gubernamentales europeos replicaron: “El vicepresidente Vance favorece una democracia ilimitada que permita la posibilidad de votar por quienes buscan destruir la democracia, y de aliarse con ellos. El canciller Scholz rechaza la alianza con neonazis. Se inclina a favor de una democracia militante que suspenda y limite constitucionalmente los derechos democráticos de quienes optan por posturas antidemocráticas”.

En Chile tenemos al Partido comunista que, declaradamente, pretende reemplazar la democracia “burguesa” que nos hemos dado, por un socialismo autoritario y que una vez instalado en el poder no permita su reemplazo, como pasa en Cuba, Venezuela y Nicaragua. Me pregunto, al decretar su ilegalidad y excluirlo del juego democrático, tal como lo practicamos hoy día: ¿No se levantaría Europa en pleno a condenarnos por totalitarios?.¿Lo hicieron durante el régimen de Allende?. ¿Hablaron durante el intento de golpe de estado de la izquierda del 18 de octubre de 2019?

La inconsecuencia ruge. La hipocresía impera. Ambas manejadas por el “wokismo” de derecha de Europa y el de Izquierda de Sudamérica y EEUU.

Las minorías organizadas se imponen sobre las mayorías que no luchan.

Melosilla, 18 de febrero de 2025

                 Fernando Thauby García

       Capitán de Navío, Infantería de Marina (R)