Archivo por meses: mayo 2018

CARTA A LOS MILITARES VENEZOLANOS

Álvaro Vargas Llosa en su columna “Venezuela, el siguiente paso” pos fraude electoral, en La Tercera del 26 de Mayo, se pregunta, ¿Qué hacer ahora?; descarta la intervención militar “humanitaria” y concluye que la mejor alternativa es: “La resistencia interna, incluyendo la arriesgada lucha en las calles y el permanente esfuerzo por sembrar divisiones en el oficialismo para romper la unidad militar, además de una presión externa muy superior a la actual, son la vía para tumbar a Maduro”.

El epítome del demócrata liberal llama al golpe de estado y a la división de las FFAA -que lleva directamente a la guerra civil-.

En la misma publicación se señala que “Maduro exige lealtad a FF.AA. chavistas en medio de detenciones de militares” y explica: “Hemos desmantelado un atentado golpista contra la democracia y la estabilidad de nuestra patria”, refiriéndose al supuesto levantamiento. También aludió al temor de una rebelión militar en su contra: “Exijo máxima lealtad, máxima subordinación a la Constitución de la República y a su comandante en jefe”.

Para la izquierda, el gobierno es popular y democrático.

Pasé por la misma experiencia, recibí los mensajes de los que querían derrocar a Allende y las arengas del entonces Presidente llamando a la lealtad con la patria (la UP); viví el golpe de estado y fui testigo del aplauso unánime –desde la DC a la derecha y de la amplia mayoría de los chilenos- que pasaron luego a la feroz persecución a los militares llevada a cabo por un Poder Judicial cohonestado por la izquierda; también fui testigo de la huida cobarde de quienes azuzaron el golpe.

Mi mejor recomendación a los militares venezolanos:

No se metan, que los políticos resuelvan el problema que crearon, con su sangre y la de sus hijos; que Maduro, los chavistas y los militares “cooptados” – que aquí terminaron como héroes o mártires por la democracia- huyan como y donde puedan o que todo siga igual en Venezuela, por muchos años, como en Cuba.

Para ustedes, si optan por la Patria y se levantan, el futuro es el abandono, la difamación y la cárcel; si valoran sus intereses personales, sigan con Maduro.

La izquierda y la derecha unidas, jamás serán vencidas.

ISRAEL – EEUU: La brutal amistad

A finales del siglo XIX surgió el movimiento sionista que defendía el establecimiento de los judíos en Israel. Algunos judíos emigraron a palestina después de la Primera Guerra Mundial. Al término de la Segunda Guerra Mundial esta migración aumentó en forma significativa.
Con el estímulo de la conmoción causada por el Holocausto, la comunidad internacional a través de las Naciones Unidas, aprobó la partición en mitades del territorio de lo que había sido el mandato británico en Palestina: una parte judía y una parte árabe.
Con esto el mundo resolvió su problema de conciencia por la pasividad ante el histórico antisemitismo europeo. Los británicos también se alegraron de deshacerse del feroz terrorismo judío en palestina capitaneado Menahem Begin, que mas tarde sería Primer Ministro de Israel.
Los palestinos obviamente no lo aceptaron y en 1948 trataron de resistirse a la partición; fueron derrotados por los israelíes que expulsaron a un gran número de ellos hacia Jordania, Siria, Líbano, Egipto, Gaza y hacia diversas partes del mundo, en una diáspora violenta y forzosa.
Francia y Gran Bretaña fueron expulsados de Medio Oriente por las nuevas potencias globales, EEUU y la Unión Soviética, después de su fallida toma del Canal de Suez en 1956.

A partir de entonces EEUU apadrinó a Israel para representar sus intereses en la región y la Unión Soviética hizo lo mismo con Egipto y Siria. Hay que recordar que ambos países mas Irak conformaban la República Árabe Unida, que constituyó el primer ensayo de gobierno moderno, laico y democrático en Medio Oriente. Así, los árabes fueron empujados a los brazos de los soviéticos y pasaron a constituir el principal escenario de la Guerra Fría.

Israel por su parte recolectó miles de personas educadas en el mundo occidental y conformó un estado moderno, estable y -con la irrestricta ayuda norteamericana- militarmente fuerte.

Los palestinos que permanecieron, desperdigados en campos de concentración en la misma Palestina, en Líbano, Jordania y Gaza, carentes de tradición y cultura política al estilo occidental, fueron condenados a la anarquía, la miseria y la humillación continua, refugiándose en líderes terroristas -venales e incapaces- que solo aportaron mas sufrimiento a su gente y dieron pie a la descalificación política, moral y comunicacional del pueblo palestino frente a la opinión pública mundial, que llegó a igualar palestino y terrorista.
Durante 70 años siguientes, apoyados en el desprestigio y la caricatura, Palestina se enfrentó a Israel siendo siempre el socio menor de coaliciones con otros estados que perseguían sus propios intereses –la Unión Soviética, Egipto, Arabia Saudita y otros- siendo vencida una y otra vez y pagando la parte mas onerosa del precio de cada derrota.

Desde esos años, hasta hoy día, EEUU continuó apoyando sucesivamente las guerras llevadas a cabo para la destrucción política y económica de Egipto, Irak, Siria y actualmente Irán, en una constante expansión para acercar a Israel a sus aspiraciones presuntamente bíblicas: establecer un estado judío desde el río Nilo hasta el Eufrates, representado en su bandera con las dos franjas celestes.

El reciente ataque a Siria, en represalia a un presunto ataque químico que hasta el día de hoy no se confirmó, tan falso como las inexistentes armas de destrucción masiva usadas como excusa para atacar a Irak, destruir al gobierno de Sadam Hussein y reemplazarlo por la anarquía y la miseria, es sin duda un precalentamiento para el futuro ataque preventivo a Irán, que ya se discute en los círculos militares y políticos en Israel.

La alianza política y estratégica entre Israel y los EEUU se ha mantenido con períodos de mayores y menores exigencias políticas y morales, pero no han cesado en ningún momento.

La actual coincidencia de personajes como el presidente de los EEUU Donald Trump y Benjamin Netanyahu, Primer Ministro de Israel, conforma la mas brutal amistad internacional desde Hitler y Stalin y es la peor culminación posible del autoritarismo, racismo y desprecio a la comunidad internacional y sin duda, la mas insolente, abusiva e innecesaria bofetada al pueblo palestino.

El intercambio de tuits entre ambos mandatarios muestra el nivel en que funciona esta alianza: “Presidente Trump, al reconocer la historia, ha hecho historia. Israel no puede tener mejor amigo en el mundo», proclamó este lunes Netanyahu. «¡Gran día para Israel. Enhorabuena!», tuiteó Trump.

60 muertos, 1.200 heridos por armas de fuego, francotiradores asesinando selectiva y personalmente a “blancos» elegidos al arbitrio de un francotirador militar judío, entre los manifestantes civiles palestinos, muestra el fondo del estanque de la decencia. Siendo joven vi una película que mostraba a un oficial nazi acodado a un ventana que disparaba y aterrorizaba a prisioneros judíos en un campo de concentración matándolos selectivamente bajo criterios que solo él conocía, en forma implacable y mortal. Me dio un asco inolvidable, pero ahora vemos a un descendiente de esas víctimas practicando el mismo juego sádico.

¿Cómo es que la ciudadanía israelí no se sorprende?, ¿es que su sentido de la justicia está embotado a tal punto?.
Pero Israel no es el único verdugo de los Palestinos, los árabes también los han abandonado. Preocupados por sus propias peleas prefieren ignorar la masacre de los palestinos y no ver el genocidio norteamericano – israelí, a la espera beneficiarse de los restos del festín.

Gaza, con la mayor densidad poblacional del mundo, 5.000 habitantes por kilómetro cuadrado, sin desagües, con agua contaminada, sin alimentos, sin trabajo, sin esperanzas, sitiados en un ciudad en ruinas, sin futuro y sin compasión del género humano.

Vergüenza para Israel, para los EEUU, para los europeos, para los árabes, los iranios, los asiáticos y los sudamericanos, vergüenza para el género humano.

Los Palestinos no tienen derechos humanos, ¿será que no son humanos?
Da asco y pena.