La prensa de hoy trae una declaración muy intensa del ex Subsecretario del Interior de Bachelet, Mahmud Aleuy, en que asevera que “este gobierno le ha dejado de dar conducción a Chile y a mi juicio los chilenos no nos merecemos eso”. “Ha perdido progresivamente el control de la agenda. Y además, ha dejado al gabinete como un gabinete interdicto”.
En “Las Cartas sobre la Mesa”, acusó que “el gobierno ha dejado de darle conducción al país y advirtió que ello puede traer la ingobernabilidad, por lo que llamó a los partidos de oposición, al parlamento, a los empresarios y trabajadores a ocupar ese espacio y generar acuerdos para enfrentar el complejo escenario económico y social que enfrenta Chile, con la amenaza de una recesión económica internacional, con los chilenos hastiados de abusos y con la credibilidad de las instituciones en el suelo”.
El ex Dirigente Socialista plantea que “es necesario buscar un sistema alternativo. El Gobierno y el Presidente es un actor clave para la tramitación de proyectos y para la solución de los problemas (…) este Gobierno no le está dando conducción al país”..
Esta parte es particularmente grave, propone que se “trabaje” directamente entre el Parlamento y “los actores involucrados en cada caso”.
¿Quiénes son esos actores involucrados en cada caso?
No pueden ser los Ministros, ya que al estar interdictos y ser de confianza y designación del Presidente, al sacar al Presidente de la línea Ejecutiva (¿deponerlo?) también quedarían automáticamente “fuera del esquema de trabajo”.
Es decir tendríamos una estructura política y del Estado completamente novedosa y original en que el Congreso, en Asamblea, discute directamente con el pueblo y sus organizaciones.
Sin duda habría que trabajarla un poco mas, pero Aleuy deja el camino bien trazado.
Respecto a la interdicción de los ministros, Aleuy posee experiencia sólida y de primera mano. En su Subsecretaría se tramó y operó el desdichado Plan Huracán para hacer inteligencia y operaciones clandestinas en la Araucanía. En este caso, para Aleuy caben dos alternativas: participó del Plan y es culpable o sus subalternos lo engañaron y ya no sería culpable sino inocente, para decirlo suave.
Posteriormente después del fiasco con la CAM, se enojó y su rabieta lo llevó tomar algunas semanas de vacaciones intespestivas y auto concedidas hasta que se calmó y regresó a su cargo, no se si eso se puede llamar interdicción. En este caso parecería mas bien que Mahmud interdictó a su Ministro.
Sea como sea, la crisis del Partido Socialista detonada por la conexión entre numerosos funcionarios / militantes del Partido Socialista de la Municipalidad de San Ramón y el narcotráfico, está estimulando la creatividad de uno de sus mas preclaros líderes.
Con su voz en off y su dicción calmada, Aleuy nos invita a la democracia directa.
Esto tiene un olorcillo a las ideas que se imponían en el PS en 1967 en su Declaración en Chillán; un dejá vu. Mala cosa.