Archivo por meses: septiembre 2014

Educación superior gratuita en Argentina

Con frecuencia se señala al sistema universitario argentino como ejemplo al cual seguir en la reforma educacional en que el gobierno actual se encuentra empeñado. Se d estaca su ingreso sin exámenes, su gratuidad y su eficacia en cuanto a la obtención de títulos profesionales.
Estudiantes chilenos que se encuentran en ese país destacan estos atributos y los comparan favorablemente respecto a los que imperan aquí. De la misma manera, opiniones de lectores argentinos lo presentan como uno de los logros de las políticas gubernamentales de su país y ponen de relieve lo injusto del sistema que impera en Chile.
Para conseguir un panorama mas objetivo es conveniente recordar que en Argentina también existen universidades privadas pagadas, que reciben cuantiosas subvenciones estatales.

Algunas cifras producidas por el Centro de Estudios de Educación Argentina (CEA), de la Universidad de Belgrano, publicado por el Ministerio de Educación de ese país y basado en las estadísticas universitarias de 2011 muestran que:
– En las universidades estatales el 44% de los estudiantes aprueban una sola materia por año.
– Las estadísticas señalan que el 29,6% de los estudiantes no aprobó ninguna materia después de haber cursado un año.
– El presupuesto universitario por graduado comparado con el porcentaje de estudiantes que aprueba una o ninguna materia señala que la brecha entre universidades con menor y mayor presupuesto por graduado llega al 1.700%.
– La investigación muestra que «aquellas universidades que tienen un porcentaje más alto de alumnos que no aprobaron más de una materia registran los presupuestos por graduado más altos»,
– La Universidad de Buenos Aires (UBA), que según el ranking Shanghai 2014 figura entre las 500 mejores del mundo, se encuentra en la mitad de la tabla de posiciones de las 40 casas de estudios nacionales, con una tasa de 30,1% de alumnos que en un año no aprobaron ninguna materia.
– Casi en la misma situación aparecen Córdoba (30,4%), Lanús (30,5%), La Matanza (30,6%) y con un desempeño algo mejor Entre Ríos (26,9%), Mar del Plata (27,2%) y San Luis (27,9%).
– La investigación del CEA exploró también la situación de los estudiantes que después de un año aprobaron apenas una materia. Las cinco peores fueron Chaco Austral (20,1%), San Juan (19%), Luján (18,9%), Formosa (18,1%) y La Pampa (18%). En las antípodas y con resultados más alentadores, se ubican Villa María (6,9%), San Martín (9,9%), Lomas de Zamora (10,1%), La Matanza (10,4%) y Lanús (10,6%).
– La UBA está dos décimas por encima del promedio general, con 14,5%. En esa franja se sitúan Patagonia Austral (14,6%), Entre Ríos (14,8%) y Jujuy (15,3%), y apenas un poco mejor Cuyo (13,6%), La Plata (13,8%), Tecnológica Nacional (13,9%) y Santiago del Estero (13,9%).
– Si sumamos los estudiantes que después de un año no aprobaron ninguna materia y los que apenas aprobaron una materia, llegamos a la conclusión de que 44 de cada 100 estudiantes universitarios nacionales no llegaron siquiera a aprobar dos materias después de un año
– Al tope de la frustración de los estudiantes que no aprueban más que una materia está Jujuy (72,7%), seguida por Salta (61,4%), Misiones (58%), Patagonia San Juan Bosco (57,3%) y Patagonia Austral (56,9%).
– El promedio nacional es de 43,9%, y la UBA se encuentra apenas por encima, en 44,6%, cerca de Chilecito (44,9%), Luján (45,6%), Catamarca (47%) y por encima del Noroeste de la provincia de Buenos Aires (43,8%), Mar del Plata (43,7%) y San Luis (43,5%). Las cinco casas de estudios con mejores cifras son Villa María (20%), Lomas de Zamora (23,7%), La Rioja (24,5%), Tres de Febrero (27,1%) y Río Negro (28,5%)
– En los albores del cepo al dólar, impuesto por la presidencia de Cristina Kirchner en 2011, cuando la moneda norteamericana se cotizaba a $ 4,14 promedio, el presupuesto total ejecutado por las 40 universidades nacionales fue de $ 18.829 millones o US$ 4.548 millones.
– En ese mismo año, entre las 40 universidades nacionales se graduaron 70.370 estudiantes. «Si se divide este presupuesto de US$ 4548 millones por la cantidad de graduados de las 40 universidades nacionales, tenemos un valor de US$ 64.633 por graduado»,
– En la Universidad Patagonia Austral se graduaron 103 alumnos en 2011, con un costo de US$ 424.408,63 por estudiante. Le siguen San Juan (US$ 228.064,78) y Tres de Febrero (US$ 221.175).
– La mejor relación costo-egresado se vislumbra en la Universidad Nacional de Lomas de Zamora (US$ 24.480), Rosario (US$ 32.220), Nordeste y la UBA (US$ 45.000, aproximadamente). La Universidad Patagonia Austral tiene un presupuesto por graduado que es 17 veces mayor que el de la Universidad de Lomas de Zamora», se puntualiza, al advertir que en la primera casa de estudios «el 56,9% de los estudiantes no aprobó más de una materia tras un año de estudios, mientras que en el establecimiento del conurbano la cifra es de apenas 23,7%».
Se destaca que los plazos de graduación oscilan entre cinco y quince años de universidad y que las materias se dan cualquiera sea el número de estudiantes asistentes.

Ley Antiterrorista efectiva

El debate de la ley antiterrorista no ha cesado desde que se dictó su primera versión el año 2004. Hace algunas semanas el liderazgo del debate lo llevaban aquellos que apuntaban de manera mas o menos disimulada a la continuación de su desmantelamiento y al encasillamiento de las acciones violentas en la categoría de expresiones democráticas mas o menos justificables según hubiera o no bajas mortales.
El atentado del día 10 vino a poner las cosas en una nueva perspectiva: en efecto, el atentado se efectuó en pleno día, en un centro comercial y nodo de transporte concurrido y causó 14 heridos, dos de ellos graves. La madre de la presidente se encontraba también en las proximidades, lo que puede haber contribuido a hacer del ataque algo mas personal.
El nuevo enfoque del debate parece ser mas realista y mas apuntado a producir resultados de condena y cárcel para los terroristas que la discusión anterior con una fuerte impronta garantista. Sin embargo, creo apreciar la ausencia de algunos elementos.

1.- La definición de la figura del delito exigiría que quienes perpetren el crimen sea una “organización”, dedicada a producir “terror” en las víctimas -la sociedad en su conjunto-. Si alguien espera que las investigaciones conduzcan a encontrar los estatutos fundacionales del movimiento y su carta organizacional, es que está completamente fuera de la realidad del terrorismo del siglo XXI. El terrorismo actual funciona en “redes”, son organizacionales formadas por nodos autónomos, no jerarquizados, interconectados en forma circunstancial o desconectados funcionalmente y unidos solo por una laxa “comunidad de objetivos y métodos”. La experiencia “celular” de las autoridades y personeros políticos que militaron en los movimientos subversivos marxistas están obsoletos. La célula marxista era jerarquizada y encuadrada en una estricta disciplina y uniformidad ideológica y operativa, algo completamente distinto a la “red” actual que puede estar integrada por una, dos, tres o cuatro personas, que a su vez pueden separarse, intercambiarse y modificar sus normas y procedimientos libremente.

2.- Si una o mas persona ponen y detonan una bomba, ¿para que podrían hacerlo sino para causar “terror”?, ¿por diversión?, ¿por tener una emoción fuerte?, ¿cómo forma de expresión política o social?. En cualquier caso, y mas allá de sus motivaciones personales, su acción transita irremediablemente por plantear una amenaza a las personas y a la sociedad, destinataria de su mensaje. Los efectos del hecho y no las intenciones de sus ejecutores son lo que las define como terrorista. Por lo demás un terrorista capturado por la policía debería ser completamente estúpido para reconocer su “intención” terrorista.

3.- Los actos terroristas son agresiones contra los Derechos Humanos. En efecto limitan o impiden la libertad de reunión, de movimiento, de expresión, del derecho a la vida, a al integridad física, a la dignidad y la tranquilidad de las personas.

4.- Quienes se expresan o actúan para reducir, minimizar o excusar los actos terroristas están haciendo “apología” del mismo. Uno puede leer en los blogs, en la prensa, ver en la televisión a personas, autoridades y políticos que expresan su “comprensión”, “apoyo”, “simpatía” o justificación de los actos terroristas cuando no producen bajas en la civilidad o cuando “solo” afectan a los policías. Que justifican la acción violenta como una forma de expresión o protesta social. Eso es complicidad y difusión del terrorismo y es un delito que también debe ser incluido en la ley.

5.- El terrorismo es la última etapa de una actitud violenta que debe ser corregida. Durante muchos años en Chile todos, -moros y cristianos- justificamos el uso de la violencia contar las personas en base a diversas argumentaciones. Esa actitud permisiva / selectiva, la violencia contar “los míos” es mala y contra “ellos” es lícita, nos ha traído hasta aquí. Aun queda mas camino y podríamos seguir avanzando hacia el infierno. Es hora de parar. Ahora.

El sentimiento violento lleva a la intención violenta y la intención violenta, lleva a la acción violenta.

Para salir del circulo vicioso, tenemos que hacer el camino inverso. Eliminar las acciones, erradicar las intenciones y controlar los sentimientos hostiles.

Aviones grandes; Pasajeros chicos

Un pasajero francés en un vuelo París – Boston enfureció porque la persona que viajaba en el asiento de adelante suyo reclinó demasiado y bruscamente su asiento. Exigió que el avión aterrizara y se bajó furioso.
En un vuelo dentro de EEUU una pasajera le puso al asiento enfrente suyo, un dispositivo que impedía que fuera reclinado, la afectada se indignó y ambas mujeres se enfrentaron físicamente. El avión debió aterrizar para desembarcarlas.
Bueno, todos sabemos que los franceses suelen ser de temperamento vivo y que no les gusta que ningún anglosajón los apriete, también es sabido que las mujeres, cada día mas próximas a los hombres en su comportamiento y carácter, suelen trenzarse a golpes, sin embargo, pareciera en ambos casos que la culpa la tienen las aerolíneas.

En efecto, nadie podría objetar que las aerolíneas del mundo se pongan de acuerdo para conseguir aviones mas y mas grandes y meter en ellos mas y mas ¿pasajeros?. Lo ideal para el negocio sería que solo viajaran personas bajitas, delgadas y ojalá amputadas de sus piernas, pero con la habilidad de caminar sobre sus manos, para evitar complicaciones durante su carguío y descarga, pero este tipo de personas no abundan.
Se ha producido una brecha entre la necesidad de las aerolíneas de comprimir a sus pasajeros y la inelasticidad de los organismos y miembros de éstos.

Pero todo tiene solución si nos organizamos para hacer posible la continuación de los márgenes de ganancia de esas empresas, cada día mas necesarias, grandes, prepotentes, bien coordinadas entre ellas y coludidas con las autoridades aeronáuticas de todo el mundo.

Aquí van algunas ideas:

Antes del embarque
• Exigir a los pasajeros que acreditan nociones básicas de yoga.
• Entregar a los pasajeros una dosis de enuréticos durante el check – in
• Exigirles un enema doce horas antes del embarque y permanecer en ayunas.
• Se recomendará el uso de toga en reemplazo de la vestimenta tradicional por permitir mayor flexibilidad dentro de las mismas. Esto mientras se progresa hacia la aceptación general del nudismo como forma regular de ¿vestimenta?.
• Se pedirá a los pasajeros que tosan o estornuden antes de embarcarse.

En sus asientos
• Respirar alternadamente entre las filas pares e impares
• Adoptar la posición que conservarán durante todo el vuelo, permitiendo la ocupación óptima de todos los espacios disponibles. Deberán quedar con un brazo extendido en dirección al cielo del fuselaje, el derecho o el izquierdo según sean diestros o zurdos.

A la hora de comer
• Las azafatas se distribuirá: una en Clase Económica, cinco en Business y diez en Primera Clase.
• La comida será lanzada desde la posición a que hayan podido llegar la tripulación de cabina y será atrapada por los pasajeros con la mano correspondiente al brazo que hayan dejado en alto.
• Se cuidará que en primera Clase y Business la comida no esté muy caliente ni muy jugosa.

Al desembarco
• Los pasajeros irán saliendo a medida que vayan recuperando su movilidad.
• El desembarco de la clase económica se producirá una vez que primera clase y business lo haya hecho y se hayan retirado los cuerpos de aquellos pasajeros que eventualmente hayan fallecido.

De la distribución de los asientos
• Dado que la mayor rentabilidad se obtiene cuando los asientos se sitúan mas cercanos al de la fila de adelante, esta distancia, medida entre el extremo del brazo de un asiento y el respaldo del que lo precede no podrá ser mayor de 5 cms.
• Las persona que tengan piernas cuyo grosor sobrepase la medida indicada deberán practicar, -en sus casas-, saltar los apoyabrazos apoyando una mano en el respaldo de su asiento y el otro en el del pasajero de adelante, sin patear el apoyabrazos en el proceso.
• Si el espacio entre filas no fuera suficiente, los pasajeros de piernas normales o largas se sentarán con las piernas recogidas, apoyando las rodillas en su mentón. Una posición optativa es cruzar ambas piernas por detrás del cuello.

Espero que estas pocas ideas contribuyan a que los pasajeros continúen apoyando y tal vez en forma mas eficiente que hasta ahora a los resultados de las compañías aéreas y así podamos seguir contando con sus servicios.

Estas reflexiones fueron inspiradas durante mi último viaje de 10 horas por aire. Agradeceré las contribuciones que los lectores puedan hacer al respecto.